El mejor amigo de Peña Nieto...AMLO??

Esquizofrenia de la izquierda

En un pasado reciente ser de la izquierda representaba todo un reto ante la opresión que se ejercía en contra de los activistas que osaran expresarse en contra del Gobierno. Era el mundo de la guerra fría donde los superpoderosos ejercían sus batallas mediante apoyos financieros y armas en suelos ajenos. Era un mundo rudo y peligroso para los que no se sometieran al poder. La izquierda mexicana ejerció un papel histórico en la democratización del País.

Pero ahora la gran amenaza a la izquierda es ella misma. Hay un proceso de degradación y de canibalización que está resultando en un debilitamiento tal que podría incapacitar a la izquierda por generaciones y dejaría de jugar un papel de contrapeso que requiere toda democracia saludable.

Con la caída de la cortina de hierro, mucho debería de haber cambiado. Digo debería porque para muchos de los dirigentes continúa viviendo la guerra fría. Parecería que ahora los enemigos de la izquierda es la misma izquierda. Veamos lo que ha sucedió en las últimas semanas:

Estando a menos de una semana de la toma de posesión de Enrique Peña Nieto, en el PRD no logran definir qué postura adoptarán en la ceremonia que se llevará en San Lázaro. El dirigente del PRD Jesús Zambrano y el coordinador Silvano Aureoles quieren protestas, pero sin impedir la ceremonia oficial. Pero los allegados a Andrés Manuel López Obrador quieren, según algunos trascendidos periodísticos boicotear la toma de posesión de Enrique Peña.

La diputada Aleida Alavez, cercana al señor de las ligas y un importante líder de la izquierda René Bejarano, declaró que “más de la mitad” de los diputados perredistas se van a manifestar en la toma de protesta de Enrique Peña como Presidente. Mientras que el líder del PRD en el Senado dijo que los 22 senadores de su bancada “vamos a tener una actitud respetuosa”.

¿Se pueden imaginar el “despelote” que podría suscitarse el 1 de diciembre? Y por más que digan que van a tomar una postura institucional con que un legislador decida lanzar algo, gritar, o tomar la tribuna, esta decisión afectará a todos los partidos y movimientos políticos de la izquierda. Para continuar hacer click aquí.