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TRASCENDIDOS 21 DE JUNIO 2013


 La prevista reestructuración de la PGR tendrá que esperar, por lo menos, un mes más. Y no porque no esté listo el proyecto, sino por un asunto de prudencia. El equipo de Jesús Murillo Karam decidió esperar a que pasen las elecciones del 7 de julio y se enfríen los ánimos, a fin de dar cauce al reordenamiento. La piedra angular de la nueva conformación de la PGR está en tener cinco coordinaciones regionales, pero como varias se ubican en entidades donde habrá comicios, se van a aguantar las ganas unos días más.

Que alguien salve a Ernesto Cordero de sí mismo, ¡por favor! No habían pasado ni 24 horas de los cambios que su grupo de senadores hizo al reglamento de la bancada panista, cuando él mismo pasó por encima de ellos. Se suponía que con la dichosa nueva normatividad interna Jorge Luis Preciado no podría imponerle su santa voluntad al grupo parlamentario del PAN, pues las decisiones deberían tomarse por acuerdo de sus integrantes. Sin embargo, a contrapelo de lo aprobado por él mismo y los suyos, Cordero se sintió de pronto dueño del balón y del rebaño. Y se aventó a ofrecerle a Enrique Peña los votos del PAN en el Senado para sacar adelante la reforma energética, al viejo estilo de los líderes sindicales priistas. Es decir se brincó aquello de que las decisiones debían de ser democráticas y pasar por votación de todos los integrantes de la bancada. ¿Pues qué no se suponía que precisamente eso era lo que tanto le criticaba a Gustavo Madero? Es pregunta que ya no entiende nada.

Sólo para el anecdotario: cuentan que, en sus tiempos de gobernador, Andrés Granier era bien chillón. No porque fuera de lágrima fácil, sino porque se la pasaba quejándose de que los recursos que le enviaba la Federación no le alcanzaban. Y si se trataba de una de las muchas inundaciones que afectaron a Tabasco, ¡más drama hacía! Quienes tuvieron que lidiar con el priista en aquella época, sobre todo los funcionarios del gobierno de Felipe Calderón, tienen un amargo recuerdo de él (de Granier, no de Felipe). Hoy que ven cómo buena parte de ese dinero no llegó a los programas -ni a la gente- sino que se lo embolsaban en el gobierno tabasqueño, dicen que no pueden menos que sentir rabia.

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Que los diputados priistas comienzan a ver con cierta preocupación que los puestos en la dirigencia del partido, a cargo de César Camacho, son únicamente para los senadores. Y se preguntan: ¿qué no hay algún diputado con merecimientos?  

Que el martes en el hotel Hilton se reunirá la plana mayor del PRD para definir la ruta ante la inminente presentación de la reforma energética. Al encuentro asistirán, entre otros, Jesús Zambrano, Cuauhtémoc Cárdenas, Miguel Ángel Mancera y los coordinadores parlamentarios, Miguel Barbosa y Silvano Aureoles. Ahí aprovecharán no solo para pedir cuentas a su dirigente nacional de lo negociado en el Pacto por México, sino que definirán cuál grupo parlamentario presentará su iniciativa; otro invitado es Marcelo Ebrard, quien está entrando al tema y hasta retó a debate a Enrique Peña Nieto, dicen los mal pensados, para atraer reflectores.

Que el tema del Pacto por México tiene muy interesados a los integrantes del cuerpo diplomático acreditado en México. El embajador estadunidense, Anthony Wayne, ya se reunió con los perredistas integrantes del consejo rector para conocer los temas que impulsarán con el aval del acuerdo partidista.

Que, por el momento, el Instituto Federal Electoral no tomará acciones contra el gobierno de Baja California ni contra el instituto local por los spots que bajaron sin tener facultades para ello. Lo que calmó cosas fue el oficio del secretario general de Gobierno de esa entidad, Francisco García, a la Comisión de Quejas y Denuncias del IFE, la cual preside Alfredo Figueroa, disculpándose por atribuirse facultades que no le correspondía y asegurando que el gobernador, José Osuna, no tenía conocimiento de lo sucedido, por lo que instruyó a tomar medidas para que algo así no vuelva ocurrir.

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Si los días no están contados para Marisela Morales en el consulado de Milán, debería de empezar la cuenta regresiva por parte del gobierno de Enrique Peña Nieto que la mandó a Italia. Esta semana no ha sido la suya, tras las acusaciones que existen en la PGR por presunto desvío de recursos y peculado, y que el paradigmático caso tamaulipeco sobre narcopolíticos, se desmoronará. Dicen los que saben que Morales ha recibido ya varias llamadas desde la Secretaría de Relaciones Exteriores para preguntarle qué tan sólidas son las imputaciones que se le hacen, a lo que reportan en la Cancillería que la han notado bastante “nerviosa”.

A propósito de la oficina que encabeza José Antonio Meade, la Secretaría de Relaciones Exteriores aún no tiene listas las propuestas sobre quiénes encabezarán las embajadas en el Reino Unido y en Venezuela. Para Londres, las cosas pueden tomar tiempo, pues en la cancillería quedaron satisfechos con los preparativos que realizó el embajador Alejandro Estivill, encargado de Negocios durante la reciente visita del Presidente. Para Caracas se mantienen los perfiles, sin tomar una decisión definitiva. Donde las cosas están más complicadas es en Alemania, destino para la ex canciller Patricia Espinosa, a quien se la han hecho muy cansada al grado de aún no pedirse el beneplácito. Le están cobrando su activismo contra el PRI y el entonces gobernador Enrique Peña Nieto, y de paso se llevó entre las ruedas a la subsecretaria, su amiga Lourdes Aranda, quien ante el temor de que le encargaran una embajada que considerara no a la altura de su carrera, prefirió irse al sector privado.

El ciudadano Marcelo Ebrard se metió en un problema en las redes sociales. El ciudadano mandó una carta al presidente Enrique Peña Nieto para debatir. Un poco desproporcionado, sin duda, al no representar Ebrard a nadie salvo a él mismo. Pero su intento por colarse –exitosamente en los medios de comunicación por ser el ex jefe de gobierno inmediato-, le salió contraproducente. Más tardó en anunciar su lance, que la comunidad tuitera empezara a preguntarle que si lo retaban a un debate sobre el News Divine –la tragedia durante su gobierno- o para hablar sobre sus “negocios inmobiliarios” en Santa Fe, estaría dispuesto a sentarse con ellos. En este caso, no hubo protagonismo de don Marcelo.

Lista para salir de imprenta se encuéntrala edición anual de Expansión sobre las 500 empresas más importantes de México. Dicen los que saben que la mejor historia en esa edición clásica de verano, no es ver realmente quiénes encabezan la lista de los barones de la industria –que por lo demás no se esperan cambios significativos-, sino el reportaje que acompaña a la lista que menciona que pese a que las empresas gozan del mayor flujo que hayan tenido en su historia, no lo están usando. La respuesta implícita es que la política económica del secretario de Hacienda, Luis Videgaray, no los convence y sí les preocupa.

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Al que se le vio ayer en primera fila durante la reunión anual de la Cámara Nacional de la Industria de la Construcción, en Mérida, fue al director del Infonavit, Alejandro Murat, quien al término del evento charló efusivamente con el Presidente Enrique Peña Nieto. Vestidos ambos con guayabera, el click generacional era evidente, mientras los demás funcionarios… sólo los miraban.

Quien metió el acelerador en el apoyo en las campañas priistas rumbo a las elecciones del próximo 7 de julio es el presidente nacional del PRI, César Camacho Quiroz. Ayer estuvo en Oaxaca acompañando a los candidatos a distintos puestos de elección popular. Le acompañó, por supuesto, el diputado federal Samuel Gurrión, el único priista que ganó por mayoría en la entidad, en los comicios del 2012.

Todo apunta a que el candidato de la coalición Puebla Unida a la alcaldía de la capital de ese estado, Tony Gali, será el ganador de la elección. De entrada, diversas encuestadoras poblanas indicaron que 46 por ciento de quienes vieron el debate del pasado martes dieron por ganador a Gali, mientras que 36 por ciento dijo que el priista, Enrique Agüera.

La nueva pelea en la “izquierda” no es precisamente por el petróleo, sino entre el PRD de Los Chuchos, AMLO y… Gerardo Fernández Noroña por el liderazgo del combate contra la supuesta privatización del crudo. Es un lío todo porque AMLO asegura que la calle es suya, el PRD de Los Chuchos que tiene la estructura y Noroña los critica a los dos porque “no son de izquierda”. Total, que ese asunto se convertirá en un… petardo.

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La clase política, comenzando por los partidos  que firmaron el Pacto por México, deben construir una reforma  energética. No tiene sentido que cada partido haga una reforma distinta. Pueden, eso sí,  hacer propuestas que vayan conformando una propuesta única. Se parte de dos certezas: Pemex no puede seguir como está, pero la única opción vetada es privatizarla. En eso hay coincidencia. Aunque en esta etapa  no lo parezca,  hay muchos más puntos de encuentro que divergencias. En una industria como la petrolera  quedan por descubrir yacimientos, pero no hilos negros. Si hay voluntad política, la construcción de la reforma energética puede avanzar rápido; si no la hay… ni bailando en  Chalma.
El carnal Marcelo la quiere hacer de Tin –Tan Ya arrancó algunas risas, aunque sea de burla. Si el ex jefe de Gobierno del  DF quiere participar en los debates sobre la reforma energética, que le pida a su partido, el PRD,  que lo meta al  Consejo Rector del Pacto por México. En el interior de ese mecanismo se van a dar debates largos y, esperamos, fructíferos. Ése es el espacio para calmar las ansias de novillero de Marcelo. Pero si lo que quiere es hacer ruido y que la gente se fije en él, que vaya preparando otro  sketch, esta vez  uno gracioso.


Los senadores del PAN agotan los adjetivos. ¿De qué otras maneras se deben calificar? Montar un golpe para quedarse con el control del dinero es algo sin precedentes en la historia de la infamia  política.  Dinero público, no hay que olvidarlo. ¿Pueden caer más bajo? El Jefe Diego Fernández dice que no es momento de intervenir,  que hay que dejarlos que terminen el pleito para que no salpiquen a los posibles componedores. Suena sensato. ¿Pasará “la noche de los cuchillos largos”, como ellos mismos la describieron? Los simpatizantes panistas deberían  escribir toneladas de cartas  exigiendo un mínimo de decoro.

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Uno más de los que aprovecha la ocasión, y ya que se está hablando de la reforma de Pemex, es Marcelo Ebrard, el ex jefe de Gobierno del DF. Tan calladito que estaba. Imagínelo en su nueva faceta de oportunismo político. Retó a debatir, cara a cara, y pronto, al presidente Peña Nieto sobre su iniciativa de reforma anunciada en Londres acerca de permitir la inversión privada en Petróleos Mexicanos. “El señor Peña va a tener que explicar y debatir en México lo que fue a proponer allá”, dijo. Quiere revivir políticamente con el debate y llama al Presidente “el señor Peña”. Le hace, pues, guiños a AMLO, a los duros del PRD y a la izquierda mexicana, que, por cierto, muy contenta con él no está. A ver si le abren un huequito, porfas.

Uno de los trasfondos del escándalo que vive el PAN es el dinero. Ernesto Cordero aseguró que Jorge Luis Preciado, coordinador de los senadores panistas, está obligado a acatar los resolutivos que dieron origen al nuevo estatuto de la bancada. Le advirtió que la decisión tomada por 23 legisladores permite dar la vuelta a la hoja del conflicto. Sin embargo, Francisco Domínguez, nombrado por los corderistas como tesorero, intentó que el director administrativo del grupo parlamentario le diera el control financiero, a lo cual, en primera instancia, se negó. A la fuerza, ya asumió el cargo. La Torre Azul  llegó hasta el Ministerio Público. El pleito ya es de barandilla.

Aunque prefiere no catalogarlo como el “Granier jalisciense”, Miguel Ángel Castro, coordinador de la fracción del PRI en el Congreso del Estado, señaló que son graves las anomalías detectadas en una auditoría a los gastos realizados en la administración de Emilio González Márquez. Nada más 387 irregularidades detectadas en 16 entidades del gobierno local, traducidas a pesos, algo así como cinco mil 300 millones de pesos. Más lo que se acumule. Suficientes como para continuar las investigaciones. Y lo que proceda. ¿Otro caso de impunidad en puerta?

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